My God, a moment of bliss

850,00 

Acrílico sobre lienzo 40x50cm

Una ciudad imaginaria se alza bajo un cielo múltiple, vibrante de lunas blancas, como una coreografía de deseos y posibilidades.

Los verdes ácidos, turquesas intensos y azules saturados estructuran una arquitectura emocional donde la materia pictórica se convierte en energía pura. No hay contención: la pintura pulsa, late, se expande.

Los elementos flotan y se solapan, generando una percepción alterada del espacio y el tiempo, como si todo sucediera en un solo instante infinito. El color no sólo ilustra, sino que evoca: crea una sinestesia que funde emoción, recuerdo y deseo en una experiencia sensorial total.

Este cuadro no representa una escena: encarna un estado. Un momento de felicidad tan potente que irradia más allá de su duración.